Para tener éxito en conseguir un préstamo se debe estar preparado y organizado. Usted deberá saber la cantidad exacta de dinero que necesita, para qué lo solicita y cómo piensa pagar el préstamo. Debe convencer al prestamista de que usted es un buen riesgo crediticio.
Las condiciones de préstamos varían de prestamista a prestamista; pero existen dos tipos de préstamos básicos: a corto plazo y a largo plazo. Generalmente, un préstamo a corto plazo tiene un vencimiento desde tres meses hasta un año, estos incluyen: préstamos de capital de trabajo, cuentas por pagar y líneas de crédito.
Los préstamos a largo plazo tienen términos de más de un año hasta siete años. Los préstamos de bienes raíces y maquinaria tienen un vencimiento de hasta veinticinco años. Los préstamos a largo plazo se usan para los gastos importantes del negocio como la compra de bienes inmuebles, construcción, maquinarias, muebles y accesorios, vehículos, etc.
Los préstamos siempre cuestan dinero. Pedir dinero prestado es una parte común de los negocios y de la vida en general. El costo del préstamo de dinero se compone de intereses, tarifas y cargos. A veces, un préstamo con una tasa de interés más alta puede resultar más barato que un préstamo a una tasa de interés más baja, por la diferencia en tarifas y cargos que podría existir.
Existen muchos tipos de préstamos: como ejemplos podemos citar los préstamos personales, préstamos de vivienda, préstamos de día de pago, préstamos libres de interés, líneas de crédito, sobregiros y tarjetas de crédito. El costo del préstamo varía mucho, según:
- El tipo de préstamo
- El tipo de prestamista (banco, cooperativa de crédito, compañía financiera, tienda)
- El plazo durante el cual usted lo devolverá
- Un préstamo con garantía generalmente será más barato que un préstamo no garantizado o a sola firma